Ojalá no fuera necesario reivindicar más los derechos básicos de las mujeres, pero todavía queda mucho por hacer, y puestas a seguir alzando la voz unidas, aquí tenéis a nuestras mujeres de este #8M.
📽️ Hoy queremos dar espacio a las mujeres del sector audiovisual de nuestro país para que compartan con los lectores de Kluid Magazine sus experiencias vitales y profesionales.
Damos voz a las profesionales de este ámbito para que nos hablen acerca de qué se debería hacer para lograr la paridad en su sector y promover un cambio real que allane el camino para entrar en una industria en la que no faltan mujeres ni talento femenino, pero sí más visibilidad, liderazgo y que no se siga estereotipando a la mujer por el hecho de ser mujer.
Además, queremos conocer de cerca cómo van a celebrar este día, sus mensajes al mundo, logros y sueños, su opinión sobre conciencia feminista, mainsplaining y sobre mujeres que inspiran a otras mujeres, sin importar su origen, raza o condición.
Este año participan: Gris Jordana (directora de fotografía), Lucía Catoria Paz (directora de fotografía), Délia Brufau (actriz), Mar del Corral (directora), Marta Iraola (productora), Ana Liébana (directora), Marta Díaz (directora de fotografía), Sara Bamba (directora y guionista), Melania Cruz (actriz), Teresa Riott (actriz), Catalina Sopelana (actriz), Paula Martín-Ferro (directora de publicidad), Tamara Casellas (actriz), Irene Pin (directora de cine), Sara Bort (eléctrica).
Entrevista a Melania Cruz, Actriz
Melania Cruz: «Me gustaría que fuésemos conscientes de la necesidad de caminar hacia una equidad e igualdad reales«
– Cuéntanos algo sobre ti, a qué te dedicas y qué estás haciendo en este momento.
Me llamo Melania. Me dedico a las artes escénicas; trabajo en teatro, cine y televisión. En estos momentos, estoy con la función A lúa vai encuberta, una coproducción entre A Quinta do Cuadrante (nuestra compañía) e Incendiaria, y preparando el espectáculo Continente María, que coproducimos con Ainé, el Concello de A Coruña y el CDG, a partir de la figura de la actriz María Casares.
Por otra parte, estamos a punto de estrenar en cines la película Malencolía, dirigida por Alfonso Zarauza.
– ¿Cuál es tu mensaje al mundo para este 8 de marzo?
La verdad es que no creo que tenga un mensaje para el mundo como tal, pero sí me gustaría que fuésemos conscientes de la necesidad que tenemos de caminar hacia una equidad e igualdad reales. Más en este momento en el que parecen ponerse en cuestión realidades como el techo de cristal o la violencia violencia machista, y hay partidos con representación parlamentaria que generan un discurso de odio y falsedad que en muchas ocasiones se ve compartido por los medios de comunicación, quienes sirven de altavoz de este tipo de discursos que lo único que hacen es polarizar y crear distancia entre las personas con una normalidad pasmosa.
Me gustaría que se le diese voz a más mujeres de todos los ámbitos para que las niñas crezcan y se desarrollen con referentes femeninos potentes, que puedan ser un ejemplo a seguir, y dar voz a muchas mujeres que a lo largo de la historia han sido y están siendo silenciadas por el canon heteropatriarcal.
– Casi un 25% de las historias contadas en el cine están escritas por mujeres. ¿Qué crees hace falta para que el sector audiovisual sea más paritario?
Creo que hacen falta muchas cosas. Y por mucho que desarrolle esta respuesta estoy segura de que me quedarán muchas cosas en el tintero.
Como decía anteriormente es preciso que se hable de Alice Guy y de tantas otras mujeres directoras, guionistas, etc. en las escuelas y fuera de ellas, mujeres que contribuyeron de manera notoria y extraordinaria al nacimiento y desarrollo del cine; que haya más mujeres en puestos directivos en los que se toman decisiones importantes a la hora de determinar el tipo de historias y de mujeres que se quieren reflejar en los proyectos, tanto a nivel de contenido como a nivel formal.
También es vital que seamos conscientes, todes, de que la realidad en la que vivimos no es en absoluto paritaria, que nos interese luchar por cambiar eso juntes y tener en consideración que nosotres, desde el ámbito audiovisual, también construimos discurso y referentes.
Tengo sentimientos muy contradictorios con respecto a esta realidad. Creo que vivimos en un momento en el que hablamos precisamente de «consumir», y esto nos lleva a que muchas veces no nos damos tiempo para digerir, para asimilar todo lo que vemos, y ofrecer un tiempo para que se conforme en nosotres una perspectiva madurada y reflexionada sobre lo que hemos visto. Una perspectiva de calma y profundidad que pueda facilitarnos un espacio real para dejar que lo que hemos recibido se filtre y cuente con el tiempo de maduración necesario para poder argumentar y poseer un punto de vista razonado.
Quizás, si nos diésemos ese tiempo, podríamos informarnos más sobre ciertas cuestiones que se nos presentan en series y/ o filmes, para poder documentarnos, buscar más datos, leer, ver más cosas sobre lo que hemos visualizado y no limitarnos a un «consumo rápido» para ir de una a otra cosa casi sin darnos cuenta.
No nos damos tiempo para aburrirnos, parece que siempre tenemos que buscar el entretenimiento, ya sea a través de las redes o las plataformas, así que de vez en cuando trato de volver al Elogio al aburrimiento de Santiago Alba Rico para sentirme algo más humana. Él dice que hay dos formas de impedir pensar a un ser humano: una es obligarle a trabajar sin descanso, y la otra, obligarle a divertirse sin interrupción.
Vivimos en una era en la que parece que si no has visto tal película o tal serie no estás donde se supone que tienes que estar. Personalmente, disfruto mucho del acto de ir al cine, sola o acompañada. Me gusta sentarme en una butaca, rodeada de personas que no conozco apenas de nada, que se apaguen las luces y, cuando se vuelvan a encender, mirar a los ojos de cualquier persona y compartir impresiones o sensaciones, aunque sean fugaces e indeterminadas, simplemente a través de la mirada o de un pequeño gesto (esperemos poder volver a vernos las caras al completo en espacios cerrados).
Creo que la televisión, tal y como la hemos conocido las personas de mi generación, ha desaparecido y me apena, porque los contenidos a los que teníamos acceso a través de ella ahora solo están en internet y, desgraciadamente, hay una brecha digital que impide que personas de diversas edades o situaciones no sepan o no puedan acceder a ellos con facilidad.
Precisamente, la propia madre del citado Santiago Alba Rico, Lolo Rico, fue responsable de programas infantiles y juveniles de tanta importancia y profundidad como La bola de cristal, que marcó generaciones. Yo también tuve la suerte de pertenecer a las generaciones crecidas con el Xabarín Club, de la Televisión de Galicia, que nos ofrecía contenidos muy diversos de series, ciencia, en los que aprendías al tiempo que te divertías, y que te ofrecían una visión más global del mundo. Enciendo la televisión escasas veces porque en general no disfruto con los contenidos que se nos ofrecen (plagados de cortes con anuncios publicitarios cada dos por tres), pero sí hay algunos programas que veo de vez en cuando y que me dan cierta esperanza, como Escala humana, Imprescindibles, Días de cine…, aunque reconozco que lo hago muy de vez en cuando.
– ¿Qué oportunidades brindan los festivales y concursos para los cineastas?
Creo que son buenos lugares para que las propuestas se vean, se compartan, se debatan, y alcancen una dimensión mayor, para que puedan perdurar de otro modo, quizás más duradero por todo lo que conllevan, en las personas que participan de esas experiencias. Son lugares idóneos para conocer personas con inquietudes e intereses diversos y para descubrir y contrastar modos de hacer y puntos de vista distintos.
– ¿Cuáles son los nuevos retos y tendencias en el sector del entretenimiento audiovisual?
La verdad es que no me siento capacitada para responder consecuentemente esta pregunta debido a la rapidez con la que cambia todo, pero lo que sí que me gustaría es que fuera más diverso y diese acogida a más nombres desconocidos que seguramente tengan mucho que contar y aportar. Creo que el star system imperante a veces nos limita.
– ¿Qué sería la vida y nuestras vidas sin el cine o sin la producción audiovisual?
Pienso que es una pregunta muy grande. El cine, la representación, forma parte de nuestra esencia humana desde tiempos inmemoriales. Nos ofrece un espejo en el que vernos reflejadas, nos invita a la autocrítica y a la reflexión. Es capaz de emocionarnos, de hacernos vibrar, reír, sufrir, de sobrecogernos, de ilusionarnos.
En resumen, no sé qué y cómo serían, pero sin duda serían vidas mucho más pobres y anodinas.
– Una frase/pregunta con la que no te gusta que te aborden solo por ser mujer.
¿No has pensado en tener niños/as?
– El mansplaining, unión de las palabras “man” y “explaining”, se sufre más de lo que creemos. Es la tendencia de algunos hombres a actuar de manera paternalista y sabelotodo sobre un tema en cuestión tratando de deslegitimar principalmente a las mujeres. ¿Has vivido alguna situación que quieras contarnos?
He vivido muchas y muy diversas situaciones de mansplaining, dentro y fuera del sector en el que trabajo. He sido tratada de modo diferente y he recibido comentarios desafortunados y ofensivos sólo por el hecho de ser mujer. Lo único que puedo decir es que me han herido y decepcionado en muchas ocasiones, pero también me han reafirmado en el hecho de que queda mucho por hacer y de que tengo tanto derecho como cualquier otra persona de manifestar mi desacuerdo con ese tipo de situaciones y ayudar a otras compañeras a hacerlo.
– Una mujer que te inspire y por qué.
Mi abuela Pilar. Era una mujer fuerte, temperamental, sensible, que tenía un discurso feminista a pesar de haber sido criada y haber vivido en un sistema patriarcal, a la que le encantaba divertirse (la recuerdo disfrazándose cada carnaval, bailando y cantando), pero que tenía muy claro que quería que sus nietas tuviesen la oportunidad de estudiar, trabajar y salir adelante por sí mismas para ser algo más autosuficientes y libres. Ojalá ella pudiera haber tenido las mismas oportunidades que he tenido yo.
– ¿Nos recomiendas alguna película, canción, libro o pintura escrita, dirigida, realizada por una mujer?
Documental: Vardá por Agnès, de Agnès Vardá
Canción: People have the power, de Patti Smith
Relato: El empapelado amarillo, de Charlotte Perkins Gilman
Pintura: La sorpresa del trigo, de Maruja Mallo
Por último, y además de lo anterior, recomendaría Women make film. Está dirigido por Mark Cousins, pero es un acercamiento a la historia del cine a través de la mirada y la obra de algunas de las mejores directoras del mundo.