Si decimos que en moda “todo vale” no nos equivocamos para nada. Es más, hoy por hoy y que se nos quiten todas esas fantasías que llevamos en la cabeza, la moda la estamos creando nosotros mismos. Pero si miramos un poquito, solo un poquito más atrás, esto no solía pasar con tanta frecuencia cuando algunos o algunas de nuestras “celebritys patrias” paseaban por el complicado mundo del estilismo desacertado y su originalidad era sin duda, digna de la crítica más feroz y despiadada. Sirvan como ejemplo dos grandes “divas divinas” del artisteo. La Pantoja y La Jurado. Que como autenticas influencers de su época, fueron capaces de dar un giro magistral al estilo más “casual” y adelantarse a lo que hoy en día consideramos como un imprescindible para nuestro armario. El chándal.
¿Y quién es este señor? (El chándal, claroooo), pues el autentico rey del domingo…, el mejor compañero de la chapuza casera…, el gran artífice de la revolución textil del S. XX. En definitiva chicas y chicos, que queréis que os diga… THE BOSS.
Yo tengo varias teorías sobre la elegancia que puede aportar este conjunto y hoy os las voy a contar: En primer lugar, que sea de una fibra muy artificial provoca que por obra y gracia de la electricidad estática se pegue al cuerpo en los lugares más insospechados y eso de vez en cuando MOLA. Seguiré comentándoos que cuantos más llamativos sean sus colores y mas exagerados sus logos, patentes, cremalleras, etc. pues más cañera y exclusiva se convierte esta prenda sobre nuestro cuerpo. Y por último, creo casi imprescindible darle siempre un aire fino y elegante a la par que sencillo y natural, por lo que el complemento también importa claro. Ya sea con tacones, con chanclas, con unos castellanos negros, con una correa de cuero que nos ajuste bien a la cintura, o con una camisa del más rancio popelín en lugar de la aburrida camiseta, lo importante es arriesgar.

Hoy metidos en faena y ya en pleno siglo XXI donde “el todo vale” dentro de la estética de la moda, llegan los Gucci, los Dolce, los Pradas y así una larga legión de firmas de primer nivel que van y ”NOS LO COPIAN”, (no el chándal claro, sino la forma de llevarlo, algo muy muy nuestro). Una moda a la que se han unido grandes figuras de la música, del cine, de la televisión, etc. En definitiva un legión de influencers que entre las masas, han situado a esta prenda deportiva en la cúspide de lo mas chick. Es más, parece que casi nos intentan vender el mensaje de: “si no llevas un look chandalero, no eres nadie” y de eso ya se encargan Rihanna, Rita Ora, Selena Gómez entre otros muchos y muchas, que se han apuntado a esta lista de seguidoras incondicionales de la comodidad, con o sin tacones, eso sí.
En definitiva y para ir cerrando este articulo, te vuelvo a dar un último consejo: Si no tienes uno. ¿A qué esperas?. Está claro que hoy por hoy las tendencias han muerto. La moda la marcamos nosotros mismos y el riesgo es importante a la hora de destacar. Ponte lo que quieras, combínalo con lo que más te guste, destaca sobre los demás pero sobre todo y muy importante: por favor, CÓMPRATE UN CHANDAL.