
Fotógrafa: Alba Yruela
Estilismo: Ahida Agirre
Maquillaje: David López
A estas alturas, es difícil que aún no hayas escuchado su voz. Rosalía ha actuado en los últimos tres años en el Primavera Sound de Barcelona y junto al rapero C. Tangana canta uno de los temas comerciales de más éxito de nuestro país ¿O todavía no has escuchado ‘Antes de que muera yo’? Pero espera, lo fascinante vino más tarde. Su presentación en sociedad como artista con sello propio vino de la mano del guitarrista y productor Raül Refree. «Los Ángeles” consiguió en apenas unos meses centrifugar las expectativas de todo el que se acerca a su música. Rosalía canta flamenco, el que sonaba a mediados del siglo XX, pero actualizado hasta la misma raíz.
La artista barcelonesa que firma como Rosalía no viene de casta flamenca, pero un día se topó con este arte, materializado en forma de santo. «Me encontré de frente con la voz más bonita y verdadera que había escuchado nunca: la de Camarón. Sin haber escuchado flamenco en mi vida me resultó muy familiar y entendí que ese iba a ser mi lenguaje por decisión propia. Desde entonces no he dejado de investigar», confiesa sobre sus inicios.
Cuentan que fue El Chiqui de la Línea quién le inspiró para estudiar en serio a los clásicos y conocer con profundidad el género, pero hay un poso en su cante que poco tiene que ver con la teoría académica. «Para mí la música tiene que ver con la emoción. Intento conectarme con las historias que contienen cada cante y no porque lo decida, sino porque lo siento así», aclara.
Este sentimiento se transpira en su álbum debut, en el tema ‘Si tú supieras compañero’, donde se escapan versos de ‘Del mundo leguas y leguas’ de la Niña de los Peines o ‘Toma este puñal dorao’ de Rosario la Mejorana, dos de los mitos flamencos de la primera mitad del siglo XX. También en ‘I see the darkness’ del contemporáneo cantante de folk Bonnie ‘Price’ Billie, otra de las canciones del álbum y que, en cambio, poco tiene que ver con el flamenco.
Sobre sus referencias eclécticas y caóticas, explica: «La globalización e internet son factores determinantes en cuanto a las referencias. Digamos que no hay barreras, uno elige en qué imaginario desea crecer, uno elige a qué quiere acercarse».
La mezcla de ritmos, versos y melodías es uno de los recursos más llamativos de su propuesta. En ‘Si tú supieras compañero’ se combinan otras tantas referencias además de las que hemos señalado y ocurre igual en ‘Catalina’ con el “apúntame usted señor escribano” de ‘El testamento gitano de Miguel de Molina’. Este proceso en el que se toman fragmentos de distintas canciones para crear algo radicalmente nuevo, podría recordar a la mezcla de “muestras”, habitual en el hip hop. Se trata de una técnica que se conoce como sample, pero ¿cuánto hay de eso?
«Aunque me encanta el sampleo, lo veo muy distinto del proceso creativo que nosotros hemos realizado en «Los Ángeles». Para mí artistas actuales de hiphop como Kanye West o Kendrick Lamar son ejemplos de artistas que están arriesgando en los últimos años dentro de la música, van por delante a nivel de sonido».
Lo cierto es que el resultado es auténtico y que ha conectado con el público contemporáneo con su mezcla de referencias antiguas y nuevas. Demuestra que se puede llenar en un festival vestida de diva millenial con sus uñas de gel, cantando a Miguel de Molina y la Niña de los Peines: «Esto es lo que quería desde pequeña y he trabajado mucho para que pasara. Aunque el esfuerzo no siempre es garantía de éxito siento que, en mi caso, los astros se han alineado para que después de tanta dedicación haya podido conseguir vivir de lo que me gusta, la música».
Como sabes, en Kluid hablamos de música, moda,
gastronomía y de ilustración, ¿nos recomendarías uno de cada?
Un disco: el último de Lil Uzi
Un diseñador: Demna Gvasalia
Un restaurante: Shunka
Ilustración: Ignasi Montreal
Texto: Sofía Soler (@sofialemoine)



Fotógrafa: Alba Yruela
Estilismo: Ahida Agirre
Maquillaje: David López